sábado, 26 de enero de 2008

Son espasmos después del adiós

Generalizar no justifica
No justifican nada las palabras
Vos no justificas porque no justificas, nunca
Y yo, facilito las cosas, esas que no haces.

viernes, 25 de enero de 2008

What am I to you?

Hoy me entere que siento, que lloro, pero no siempre, que sufro que grito que busco y no encuentro, que cuando soy yo las cosas no funcionan pero no puedo ser nadie más estoy en el centro de algo que me atropella por todos los costados de mi piel, algo que corre a mi alrededor, solo veo colores borrosos de gente que pasa todo el tiempo gente que corre y no tiene tiempo de detenerse gente como los chinos del barrio chino, letras que no entiendo como las letras chinas, cosas que pasan sin que me entere.
Hoy vino en la terraza, y nadie más.
Hoy yo conmigo y sin vos
Hoy esta cosa que me rodea dejandome sola
Hoy aislada en la ciudad de la gente mas sola del mundo
Hoy sola con millones de personas caminando por la calle alla abajo, tan lejos
Hoy luces de miles de soledades
Hoy nada mas que eso
Hoy esta masa que no me deja llorar, que no deja que me duelas aunque en el fondo me duelas y lo sabes
Hoy con mi tristeza, la de siempre, que siempre regresa

jueves, 24 de enero de 2008

Que el blanco sea blanco que el negro sea negro

Una sugerencia: muerase, porque no lloro no siento no perdono no olvido pero resisto a los recuerdos; si es hora del adiós se facilitan las cosas y es simplemente adios, un fingir que nunca estuviste ahi, un fingir que esas calles no fueron nuestras calles siquiera un segundo, un sacarme esta masa de la garganta de una vez y para siempre, que se me haga lagrimas que no me interrumpa para seguir con este camino que no va a ningun lado pero es solo para mirar solo para seguir solo para hacerme camino para ver el camino oler el camino llorar el camino, pero saberme el camino. Siempre el camino y yo, y nada más.

lunes, 21 de enero de 2008

Al despertar

Me desperte y me habian cerrado la ventana, estaba oscuro y me llamaban para almorzar, el campo, tan silencioso con pájaros como solo el campo puede ser, él estaba durmiendo en el suelo, con la gorra sobre los ojos, como alguien que duerme al sol y no es afecto al trabajo, cuando le pregunte que hacia ahi dijo que bajaba por el frio del parqué o parquet, me levanté, un gato obsesionado con rasgar una bolsa negra estaba en la cocina, tenia los ojos encendidos y el pelo erizado, como el gato de un cuento que me horrorizó a los 12 años, el gato era inconexo, no guarda relación con el entorno pensé. Entonces me desperté, la cara de una chica muerta asomaba bajo la cama, la ignoré porque ahora me llamaban para comer, una bicicleta roja y chiquita de payaso asesino estaba a los pies de la cama, ya habia anochecido, la casa estaba en penumbras, pero seguia en el sueño, me queria obligar a despertar y me vi durmiendo con un rayo de sol sobre una mano que descansaba sobre la almohada, tan plácida, tan nene de 3 años cansado de jugar, grite con desesperación con el miedo animal de que te muerda el perro de la otra cuadra, pero nadie me escuchaba, no podian porque dormia placidamente y no me queria estropear el dulce sueño.

sábado, 12 de enero de 2008

Ruptura, que no es separación, solo ruptura

Llegamos todos juntos, aún sabiendo que era una mera visión, juntos pero separados, ellas tan chicas con perlas y blusa rosa, rulos y carteras; y ellos, tan Diego y Chise como solo Diego y Chise saben hacerlo, saben ser, era la indecisión de irme de un barco en el que navegué muchos años para saltar a un mar que se hace amigo, tal vez no cristalino, tal vez no hermoso, tal vez no tibio ni refrescante, simplemente nuevo.
Pero no era una ida definitiva, en ese momento, y probablemente aún lo sea, un saltar del barco agarrandome de alguna barandilla, o salvavidas que alguien desesperadamente o no, me arroje, para matener un lazo con el barco.
Estando entre el barco y el mar, llegamos por fin, nos sentamos, ahora clara y visiblemente separados, de a poco me salí del salvavidas, pero manteniendome cerca del mar, como quien teme a los tiburones, aunque de arriba les digan que esos no son de los que devoran. Vinieron ellos, los malabaristas con sus cosas en bolsos, sus caras de cansancio y de viaje y de recuerdos, se sentaron y buscaron la amistad como quien busca desesperado unas llaves en una cartera, pero solo encuentra caramelos, un peine, una billetera, un boleto del colectivo; mas las llaves no, eso no, y es desesperante pero inútil, se perdieron en la calle...
Fuimos a la plaza y fue repetición, un grupo como aquella noche, un banco talladamente identico, una luz publicamente igual, aun asi esta vez fue distinto, mi incomodidad era palpable, aunque invisible, tenía frio y desubicación no sabia bien por qué, intenté llegar a entenderlo, pero fue inútil, se me escaparon las certezas como un colibri que aletea desaforadamente. Tal vez por eso comence a patear las piedritas de ese suelo, intentando hace un pozo que me salve que me aísle de ese frío y de ese grupo tan ajeno, tan sucio, tan ellos, y yo, tan yo, tan aparte, tan espectadora pasiva que se impacienta, que quiere que la lleven a una mesa para arroparse con cerveza y cigarrillos, y una silla cómoda para subir los pies, como si anduviesen lagartos nadando por ese mar de baldosas que era ese bar donde me esforzaba por transportarme mentalmente a ese viejo mundo de frivolidad y estupidez, pero a la vez amigos, y risas y charlas superficiales para espantar el pensamiento cuando duele mucho pensar en enriedos de cosas que son solo mias y a la vez del resto, auqnue no lo perciban o no se den cuenta o no quieran admitirlo.
Al fin, el pensamiento se hizo real, ahi estaba de nuevo, en el frívolo oceano de baldosas, pero no hubo viejos amigos y risas y charlas, solo la sensación de no pertenencia antes descubierta pero que aún no se explica del todo, es algo mas, que las palabras no me dejan expresar, una sensación tan mia tan profunda que me hizo detestar todo lo que me rodeaba, fue un deseo de, simplemente, escapar, correr a no se donde... lejos, tan lejos que no es el pueblo ni la ciudad ni el campo de tapiz de estrellas.
Antes de que me aniquile la angustia de la soledad en compañia; y de irme, a dormir probablemente, a ver si el sueño me llevaba en su dulce alfombra a ese lejos que no encuentro aún, a ese lejos que tal vez existe o tal vez es una estúpida utopía; le dije a Chise que fueramos adentro, y era confortable, y tibio y dulce, el acurruco de la gente y las voces y la música, me devolvieron muy lentamente el buen ánimo, o al menos, el ánimo "original", el característico de mí, o simplemente era que ya estaba bastante borracha y con sueño y con pasta de muchos cigarrillos en la garganta y cualquier cosa me daba igual, vino Diego, después, apareció el clon o Gabriel, es lo mismo, nos fuimos a una mesa, a fingir alegría por conseguir ese estúpido lugar apartado del frío, alejado del mundo cerca de la música que son temas conocidos para cantar para sentir la falsa seguridad de grupo, para ser felices y todos amigos y todos uno por 3 min 42 seg.
Luego, simplemente miradas vacías, charlas superfluas; para terminar cada uno en su zona, su cigarrillo y su vaso con espuma de cerveza caliente... miraba la mesa, las luces que giraban como insectos cerca de un fluorescente, se estrellaban insistentemente sobre ella, dando la ilusión de que se movía hacia mí, hacia abajo, se curvaba y recobraba su posición original, constantemente el mismo circuito como un faro y su luz espectral. El clon quería saber quien la movía, pobre criatura, todo hay que explicarselo porque nunca se detiene en el análisis, no se lo expliqué, solo esperaba el momento ese, el preciso instante en que mueren las palabras y el sueño llega y me abraza en mi habitación cálida con peluches con tierra zapatos por el suelo y mi valija roja debajo de la cama, esperándome ansiosa, constantemente.

viernes, 11 de enero de 2008

this wall

esta pared entre vos y yo, este muro tan alto, tan rascacielos que siempre nos separa, aunque sea tan transparente tan espejo de agua, siempre está ahí, insalvable, y vos, inalcanzable como siempre, como tantas veces, corro tras de vos, pero el muro siempre está ahi, sin olvidar que vos, corres mucho más rapido, siempre más rápido, lógicamente
te veo como una imagen una estúpida imagen de mi pasado, mas no de mi presente, simplemente una imagen de mi pasado que es traida a mi en esas cosas cotidianas que tambíen lo fueron ayer

jueves, 10 de enero de 2008

Cartas


Miraba cartas viejas, de gente que se alejo tanto que son uno de esas tantas caras que veo en la calle, esas imagenes desdibujadas, en su mundo, en su vida, tan lejos, tan inalcanzables... tambien veo cartas viejas de mi vieja, redundante, tantas cosas pasaron, tanta vida que se junta, se amontona en esos trozos de papel con dubujos, como si las imágenes de rosas o paisajes ocultasen todo lo que en verdad pasa, una estampa que nunca es el fiel retrato de la realidad, como tampoco, a veces lo son las cartas... despues la de mis amigos, que siguen siendo mis amigos, están ahi, como siempre, aunque no sean los mismos, ni yo sea la misma.

Después quemaba cartas, rompia cartas, aunque los recuerdos queden ahi, siempre latentes, siempre presentes, para que quemarlas? es inútil, es estúpido, es hecharle azúcar al mar, es plantar un árbol en Buenos Aires, es... la impotencia de saber que aunque las queme, nunca se destruirán, o por lo menos tardarán años en hacerlo.

lunes, 7 de enero de 2008

Un flan

Jugabamos con las palabras, las amasabamos, las enrevesabamos, las teñiamos a nuestra manera, fue un flan, un tremendo flan.
Pero esa noche, o tal vez esas noches, porque ambas se me hacen una, o mejor dicho, las hago una, las moldeo a mi manera, desecho lo inútil o lo estúpido o lo superfluo, me quedo con lo que da color lo que da musica o por lo menos algun ruido a mi interior.
Esa noche era un laberinto de carteras y gente que te estruja tal vez sin querer pero más posiblemente queriendo, y me movia con dificultad, en esa maraña de cuero sintético a falta de animal muerto, esa maraña de caras que a esa altura de la noche se me presentaban borrosas e identicas a cualquier otra que ande por ahi, en cualquier calle, en cualquier lugar, en cualquier tiempo.
Nos desplazabamos como orugas a la barra, tomabamos unas Quilmes en vasos plasticos no muy limpios seguramente, alguien estrelló una botella contra el suelo, cayó con un ruido seco y vidrioso, todos se dieron vuelta como si pasaran los bomberos o hubiera un incendio o un incidente, o una pelea de verdad y no una teatralizada por un simple ruido que pudo ser de cualquier cosa, pero siempre ha de ser lo peor.
Y después no hubo mas Quilmes, nos encajaron amorosamente una Stella, y ahi fuimos, a una mesa de caño con sillas de caño y se estaba comodo.
Pero eso fué despues, antes estaba la cia como les gusta decirle, que se arrastraba y era una pantera en la oscuridad y estaba el armado y la plaza con luces bajas creando ambiente como una fiesta de 15 planeada 2 meses antes, y llegaron los otros y hubo un silencio de calle el domingo a las 10 de la mañana, la tensión era como una gorda con corset, pero didimulamos o mas bien lo intentamos, protegidos bajo ese pasamanos que era el arco art deco que nos dividia en lineas, bajo las luces del alumbrado público.
Vino el clon de un chico que hubiese amado a los 16 años y me hablo de cosas copadas que se podian hacer y de lo lindo que es mi nombre porque combina conmigo porque soy linda y es filosofia y dibujos para firmar por otro solo por buen gesto y rulos de griego joven y de perfil, tan hermoso, inalcanzable y cercano. Pero es un niño! solo 14 años aunque me diga que 15, y yo no puedo criar a nadie, no soy madre, no puedo educarlo y arroparlo las noche de frío, me sentiría, ademas, como una put vieja como Nicole, y no se si soportaria encarnarla, seria injusto y ridiculo, asi que le dije que fuera a jugar a los autitos, mientras el mexicano tiraba un vaso al piso y un humo azulino envolvía a Chise dandole un aire de lejanía mientras volviamos al bar.

jueves, 3 de enero de 2008

Dante dixit...

Ahi esta Dante, me habla y parece no ser el, aunque realmente no lo conozca, ese cordobés tiene algo tan familiar, por lo tanto tan inpropio, cuando me habló de la Antartida mas sospeche de el, que no es el, que quien presiona el teclado y me hace llegar toda esa manga de frases de hielo es Marcelo, pero no Marcelo, mas bien un recuerdo borroso de el, que se le cuela de algun modo como por debajo de la piel y le hace escribir esas cosas, al pobre Dante, cobayo de indias, que teclea y teclea y no entiende bien por que pone esas cosas, como poseido por una furia de decir cosas que inevitablemente se le salen de los dedos qunue no quiera decirlas, y terminamos hablando de los 300 tipos de quesos y del champagne (original) y de algo como onomatopeyas pero onomatopeyas... mmmm paradojas maybe.
Despues esta el rubio, ese descendiente romanesco o grieguesco segun sospecho que se me escapa entre los dedos pero no puedo ahcer nada, no quiero hacer nada mas bien, porque cada vez que intento hacer algo es inutil, como intentar alcanzar el 60 o pretender que te espere un micro en Retiro, encima en época de fiestas, que quiero?! Es inutil porque si, porque la vida es asi y asi se acepta che, es un regalo y no hay que andarle mirando los dientes, si llego por algo será y si se me desvanece como paloma estrellada contra un vidrio por algo será..........
Fue bueno mientras duró auqnue tal vez no tan bueno, siempre estaba ese faltante ese hueco oscuro que nos seguia como un perro de la calle adonde fueramos, siempre ahi: en mi casa en los bares en las plazas vagueando por Palermo, siempre estaba ahi: el perro, era un miedo a la oscuridad, algo como por detras y a la vez tan cerca, una sensación en la nuca que no me dejaba en paz.
Toda una tremenda actuación para consolarnos y pasar el tiempo tan inútil y tan clara que no es necesario decirnos nada, ahi esta ese abismo entre los dos que tal vez pretendimos cruzar por medio de una estúpida rama vieja y podrida, para terminar prendiendonos a un borde mugriento como imbeciles no habia necesidad de ensuciarse, pero sin embargo lo hicimos the sign said stop pero seguimos, debi cortarlo de un principio
y no soportar este dolor que no es un dolor demasiado lastimoso, solo el dolor de adoptar un cachorro y que mamá no te deje tenerlo pero tiene el pelo suave y la mirada tierna pero va a crecer dice la vieja
y asi estamos